08/02/2025
Su esposa asegura que no tiene “acceso a un tribunal” y que no les han dado “ningún tipo de información”.

María Alexandra Gómez, esposa de Nahuel Gallo, el gendarme argentino detenido en Venezuela desde hace dos meses, denunció que su marido sigue “incomunicado” y “sin acceso a un tribunal”, mientras el Gobierno mantiene gestiones diplomáticas para conocer su situación.
“Parece mentira que ya mañana sean dos meses sin Nahuel, han sido durísimos“, expresó Gómez en declaraciones a radio Splendid. “Es horrible no saber nada de él. Está detenido e incomunicado, no hemos tenido ningún tipo de información“, denunció.
De acuerdo al relato de Gómez, su esposo ya cumplió 60 días de detención sin haber sido presentado ante la justicia venezolana. “No entendemos qué está pasando”, sostuvo. Además, aseguró estar en contacto con representantes de la Cancillería argentina, quienes, según indicó, “siempre” le brindaron “apoyo”. Aunque afirmó que todos sus intentos legales para comunicarse con Gallo fueron infructuosos. “Nosotros hemos intentado todo lo legalmente posible para comunicarnos con Nahuel y no hemos tenido ningún tipo de respuesta”, lamentó.
La esposa del gendarme remarcó que su marido es una persona “totalmente apolítica” y que “no fue enviado por el gobierno argentino”. “Nahuel es una persona totalmente apolítica, no fue enviado por el gobierno argentino”, aclaró.
Las últimas imágenes de Gallo son de los primeros días de enero, cuando el gobierno venezolano mostró un breve video en que se lo ve caminar en un centro de detención. Las fotos y videos llegaron horas después de que el gobierno argentino denunciara ante la Corte Penal Internacional la “desaparición forzada” de Gallo.
“Este hecho constituye una violación grave y flagrante de los derechos humanos, evidenciando un patrón sistemático de crímenes de lesa humanidad que se están cometiendo en la República Bolivariana de Venezuela, los cuales se encuentran claramente bajo la jurisdicción de la CPI”, señaló y agregó: “El gobierno argentino continuará utilizando todos los recursos legales y diplomáticos para garantizar los derechos humanos y exigir justicia internacional”.